PALCO PREMIER – Tomateros

PALCO PREMIER

= PALCO PREMIER =

 

= Pancho Campos, rumbo a su victoria 200

= Esteban Loaiza, sigue juicio, en libertad

=Le cayó la ley al “Chufito” y todo “por macho”

= La Liga Mexicana y su criticado experimento

 

Jorge Luis Telles Salazar

 

Desde hace dos temporadas, Francisco Campos se retiró del beisbol activo en la Liga Mexicana del Pacífico; pero sigue ponchando gente y ganando juegos en la liga de verano. Aquí, se desempeña como coach de bullpen de Tomateros de Culiacán; allá todavía abre partidos con los Piratas de Campeche.

Campos es, sin duda, uno de los mejores pitchers en la historia del beisbol mexicano, tanto en un circuito como en el otro. Y en lo que atañe al verano tiene una meta trazada, que posiblemente cumpla en esta misma temporada: su victoria número 200.

Ya lleva, por si usted no lo sabe, 197.

Hace unos días, en efecto, el sonorense trabajó por espacio de cinco entradas y dos tercios y llevó a su equipo, Campeche, a un triunfo de 7 carreras contra 3 sobre los Guerreros de Oaxaca. Admitió 5 hits y 3 carreras y ponchó a 3 enemigos, como complemento.

Ahí va, entonces, en tránsito hacia las dos centenas de juegos ganados en la Liga Mexicana de Beisbol. Y deberá lograrlo este mismo año.

En la Mexicana del Pacifico, Pancho Ponches tiene marca de 77 victorias y 54 derrotas y un magnífico 3. 14 en carreras limpias admitidas, en una larga carrera de 20 temporadas; la mejor de ellas en 2003-2004, cuando ganó 10 juegos y solamente perdió dos. Con Culiacán destaca el 8-3 de la temporada 2011-2012, con 3. 84 de efectividad.

Campos llegó a Tomateros para la campaña 2010-2011 y los seguidores de los guindas levantamos los brazos al cielo, para darle gracias al Señor. Con los juegos que nos ganaría, en ese y en los años por venir, el contrato ya estaba más que pagado. Era, junto a Pablo Ortega, legendario verdugo de Culiacán, al igual que el veteranazo Angel Moreno y Oscar Rivera. Desde que aparecían en la lomita de pitcheo, estábamos perdidos.

Precisamente, uno de los mejores juegos de su vida lo lanzó Cisco Campos contra Tomateros de Culiacán. Fue en la serie final de la campaña 2001-2002. “Pancho hizo un ponchadero”, cabeceó José Roberto Riveros, jefe de la sección deportiva de Noroeste-Mazatlán, al sacar 18 de los 27 outs por la vía del chocolate y admitir solo par de imparables. Con ese triunfo los rojos del puerto emparejaron a 2 por bando , aunque a final de cuentas se quedaron cortos y Tomateros ganó ese campeonato, gracias a los brazos de Vicente Padilla y Rodrigo López. De hecho, desde antes de comenzar la finalísima, Culiacàn ya tenía el título en la bolsa, al presupuestarse dos victorias de Padilla en igual número de salidas y dos para Rodrigo en las mismas circunstancias.

Y así fue, en efecto.

De regreso con Campos y a la actualidad, esa victoria número 200 sería justicia divina elemental. Ojalá y pudiera obtenerla en esta mini temporada de la Liga Mexicana del beisbol, a la que ya solo le faltan 14 partidos. Y si no, pues en la siguiente, que comenzará los primeros días de julio venidero.

Suerte.

= ESTEBAN LOAIZA, LIBRE BAJO FIANZA =

Mientras.

En el sur de California, el pitcher mexicano Esteban Loaiza – alguna vez muy cerca del trofeo Cy Young – salió libre bajo fianza, luego de tres meses en prisión. Loaiza, como usted debe saberlo, fue detenido en Imperial Beach, acusado de tener 20 kilogramos de cocaína en una casa de su propiedad.

El juicio en contra de Loaiza seguirá adelante por supuesto y podría prolongarse más tiempo del estimado; pero ahora podrá llevarlo en libertad condicionada, supervisada por un grillete electrónico. Como quiera que sea: mucho mejor que estar en la cárcel.

Esteban, con orígenes en el Limón de los Peraza, cerca de Mazatlán, atraviesa por un momento difícil; pero eso no opaca su carrera como beisbolista profesional.

Aquí, en la Liga Mexicana del Pacífico, Loaiza lanzó para Tomateros de Culiacán en la temporada 1996-1997, cuando ya brillaba en Grandes Ligas. En aquellos años, Loaiza se administró y nos reservó su verdadero potencial para el final: para el sexto juego de la Serie del Caribe, en Santo Domingo, República Dominicana, cuando dictó una cátedra de pitcheo sobre el equipo anfitrión para darle a Tomateros su primer campeonato en Series del Caribe. Fue el mismo encuentro que decidió Mario Valdez – hoy gerente deportivo del club local – con un batazo de hit entre primera y segunda para empujar la carrera del triunfo en los zapatos de Heriberto García.

Loaiza también mostró su calidad en el primer clásico mundial de beisbol, aquel en el que el equipo de México eliminó sorprendentemente a los Estados Unidos y sus grandes estrellas. Además de su capacidad, Esteban fue líder de ese equipo, por su coraje, empuje y orgullo nacionalista.

Obviamente, ya está retirado del beisbol y ya no volverá a la actividad; pero tiene que reconocerse que fue un gran pitcher mexicano, con excelentes números incluso en las Ligas Mayores.

¿No cree?

= “CHUFITO” LE PEGO A LA DOÑA Y ¡AL BOTE! =

Por cierto.

Otro pelotero en problemas es el también sinaloense Roberto Osuna, cerrador estelar de los Azulejos de Toronto.

Su joven novia lo denunció por maltrato y como allá, en Canadá, también ha cobrado auge el castigo a esta clase de delitos, “el Chufito” fue arrestado de inmediato y llevado a prisión, aunque ya está en libertad.

Ahora será sujeto de otra sanción, de parte de los Azulejos, con todo y ser el cerrador número uno del equipo. El relevista más joven en toda la historia de las Ligas Mayores, en salvar tantos juegos como lo hizo Osuna durante la temporada pasada, para llegar, muy temprano, a niveles estelares.

Roberto Osuna saldará cuentas con la justicia; seguramente su novia le otorgará el perdón y de un momento a otro lo veremos nuevamente en el centro del diamante.

¡No! Si para cabrones…¡los sinaloenses!

Lamentablemente.

= LA LMB Y SU EXPERIMENTO =

A manera de colofón.

El primer experimento de la actual temporada de la Liga Mexicana de Beisbol está por llegar a su fin y podría ser que los directivos hagan de lado su orgullo y admitan, con valentía y honestidad, que ya fue suficiente.

Esta temporada del circuito veraniego, como seguramente usted lo sabe ya, se dividió en dos torneos cortos, como se juega el futbol nacional. Con dos campeones por torneo, desde luego.

Bien.

Ya le restan dos semanas para la conclusión del rol oficial del primero; vendrá casi un mes de “play offs” y otro mes de descanso. A mediados de julio comenzará el torno “de clausura”, bajo el mismo sistema de competencias y un formato similar. La actividad concluirá en octubre 12, justo en el arranque de la campaña 2018-2019 de la Mexicana del Pacífico.

Hasta ahora, no se ve por donde estén los beneficios en la aplicación de esta idea; pero por ahora los directivos de la LMB llegarán hasta el final. Primero orgullosos que sencillos.

La verdad: no les queda de otra.

Quizás para la temporada 2019, sin embargo, cambien de parecer y regresen al formato similar; pero ya es cuestión de ellos. Exclusivamente.

Y con esto, nos vamos ya, amigos aficionados al beisbol.

Como siempre, con nuestros mejores deseos.

Que Dios los bendiga.

=0=